Monumentalmente hay que destacar La ERMITA DE LA VIRGEN DEL LIRIO, situada a dos kilomentros del municipio. Y la IGLESIA PARROQUIAL DE SAN CRISTOBAL en lo alto del pueblo.

ERMITA DE LA VIRGEN DEL LIRIO

A los pies de la falda norte de la Serrezuela de Pradales, se levanta la ERMITA DE LA VIRGEN DEL LIRIO, uno de los corazones espirituales de este paisaje montuoso que separa Segovia de Burgos, Destinada a albergar a la patrona de Honrubia de la Cuesta y a celebrar sus fiestas y devociones, destaca por la monumentalidad de sus proporciones.

La imagen de la titular se conserva por seguridad en la iglesia parroquial de San Cristóbal. Poco se sabe sobre esta advocación de la Virgen, la cual se aparecio en el siglo XVIII  a unos pastores cerca de un pozo, dónde los vecinos la levantarón la ermita en lo mas alto del territorio

Esta emparentada con la Virgen de los Lirios de Alcoy (Alicante) cuya aparición a un sacerdote tuvo lugar a mediados del siglo XVII. Cuenta la tradición alicantina que la Virgen se apareció en la raíz de un hermoso lirio mientras el cura meditaba un verso del Cantar de los Cantares: "Como lirio entre espinos, así es mi amiga entre las vírgenes".

La ermita consta de tres naves, cabecera y sacristía adosada al este. Al igual que la parroquia de San Cristóbal de Honrubia, pudo ser en proyecto un templo con planta de cruz latina, de tal forma que el centro del crucero sería la actual cabecera. Todas las cubiertas del edificio son de madera vista, menos la de la sacristía que presenta una bóveda de lunetos decorada con gruesos motivos vegetales, geométricos y querubines, muy propios del gusto barroco de finales del siglo XVII y de principios del XVIII, tiene dos accesos, uno al norte y otro al sur. Ambos son puertas con sencillos arcos de medio punto.

El coro se dispone a los pies de la nave central y su estructura es de madera. Ocupa el espacio interior de dos arcos enfrentados que comunican con las naves laterales. Otros dos arcos de medio a cada lado, más grandes, cumplen idéntica función. El arco triunfal que separa la nave central de la cabecera es rebajado y mal planteado. Cada uno de los otros lados de la cabecera tienen grandes arcos de medio punto ciegos, como formando una estructura para sostener una cúpula de meda naranja que no llegó a construirse. La sacristía, situada al este, tienen al exterior dos ventanas rectangulares, cornisa de piedra y contrafuertes en las esquinas. En una ventana se puede leer: "Se hizo esta obra de limosna. Año de 1.719". Sin embargo, por las trazas, la sacristía ha de ser obra del siglo XVI. La inscripción se referirá a la apertura de la ventana o, incluso, a la ampliación del resto del conjunto. Otra reforma puede apreciarse en el ensanchamiento del muro oeste y el añadido de las naves laterales. Sobre este mismo muro se levanta la espadaña, con su campanario de dos cuerpos. Dos vanos de medio punto se abren en el inferior y otro más pequeño en el superior, flanqueado por pirámides con bolas que tanto recuerdan a la arquitectura herreriana.

La IGLESIA PARROQUIAL DE SAN CRISTÓBAL de Honrubia de la Cuesta es un templo de buen tamaño, construido según los cánones de la arquitectura barroca de la segunda mitad del siglo XVII. Es posible que sustituyera a una iglesia más antigua, seguramente románica. Se edificó usando la piedra de color rojo arcilloso, tan abundante en la zona.

Parece que las trazas del edifico fueran originalmente de cruz latina, aunque el proyecto quedó inconcluso y no se levantaron los brazos del crucero. A los pies de la nave, pegada al hastial occidental, se levanta una torre de dos cuerpos, con muros de mampostería con sillares reforzando esquinas y vanos.

El cuerpo inferior es macizo y termina en una marcada cornisa que sostiene el cuerpo superior, donde se abren grandes arcos de medio punto para albergar las campanas. La torre original se derrumbó y fue reconstruida a principios de los años cuarenta del pasado siglo.

En el lado sur de la iglesia se adosó un volumen más bajo que hace la función de atrio con dos cuartos laterales. La portada del atrio es de tres arquivoltas deprimidas sobre columnillas con pequeños capiteles. Por su aspecto se podría fechar en el siglo XVI, y pertenecería a una reforma de  la iglesia primitiva. El atrio protege de las inclemencias del clima de la Serrezuela la única entrada del templo.

Dentro de la nave, el coro se dispone a los pies, sobre un gran arco rebajado que vuela de lado a lado. El espacio de la nave se cubre con bóveda de lunetos triangulares con dos arcos fajones que la dividen en tres tramos. Se adorna la bóveda con sencillos motivos geométricos, el espacio que iba a ser el centro del crucero se cubre con cúpula de media naranja sobre pechinas. La cabecera es corta y elevada. Se cubre también con bóveda de lunetos.

El altar mayor es neoclásico, de formas muy puras y arquitectónicas. La hornacina que alberga al santo titular se sitúa sobre el templete que albera el sagrario. En dos peanas laterales aparecen San José y San Antonio de Padua.

En la nave se sitúan las imágenes de la Dolorosa y de la Virgen del Lirio, patrona del pueblo. En el lado norte del "crucero", se disponen el púlpito de piedra y un retablo neoclásico con Cristo crucificado. Enfrente, hay otro retablo gemelo de la Virgen del Rosario del 1.894.

Un arco de medio punto da acceso a una capilla un retablo con las imágenes de Santa Águeda y el Niño de la Bola y una pila bautismal de estilo románico con su característica forma de cáliz de flor, con pétalos gruesos y muy marcados. En la sacristía, adosada en el lado norte de presbiterio, destaca la pila lavamanos de piedra.